En la entrada de hoy os enseño cinco plantas purificadoras de interiores que tengo en mi casa y no es que lo diga yo, no, lo dice la NASA. Las plantas me aportan mucha calma y una gran sensación de bienestar, además, me produce mucha satisfacción ver como crecen cada día. Si a esto le añadimos las numerosas propiedades saludables que poseen puedo deciros que se han convertido en imprescindibles para mí.
Entre las numerosas cualidades que poseen las especies que os enseño a continuación, destaca su capacidad para purificar el aire de cualquier estancia del hogar. Además, punto muy importante: todas son muy fáciles de cuidar. Estas plantas, prácticamente se cuidan solas, siguiendo unos pequeños consejos seguro que podéis sacarlas adelante. Si nunca habéis tenido una planta o las que habéis tenido no han aguantado más de una semana, estas son una buena elección para comenzar.
LENGUA DE SUEGRA
Sanseviera trifasciata
También conocida como lengua de tigre o espada de San Jorge, para mí, la reina de las plantas de interior. No paré de buscarla hasta que la tuve en mi poder. Puedo olvidarme completamente de que existe y, cuando vuelvo a mirarla, ella sigue igual de bonita que el primer día. Es perfecta para colocarla en aquellos lugares donde no llega demasiada luz, ya que aguanta muy bien este tipo de condiciones. Truco: en invierno la riego una vez al mes y en verano, como mucho, dos. Según determinadas creencias, es una planta que atrae la buena suerte y aleja las malas vibraciones. Entre sus propiedades, destaca su capacidad de transformar el dióxido de carbono en oxígeno y, además, existen algunos remedios medicinales elaborados a partir del jugo de sus hojas
DRACAENA
Dracaena marginata
Su gran capacidad para adaptarse a los espacios interiores hacen de la dracaena una planta perfecta para decorar cualquier rincón de casa. Tolera casi todas las condiciones luminosas y necesita un riego escaso, yo la tengo colocada en un lugar donde a penas recibe luz y su aspecto es maravilloso. Es necesario limpiar sus hojas de vez en cuando ya que suele acumular bastante polvo. Por ponerle un pero, es una planta de crecimiento muy lento. Al igual que la lengua de suegra, es una gran transformadora de dióxido de carbono en oxígeno, también es capaz de controlar la humedad en ambientes cerrados.
POTOS
Epipremnum aureum
Creo que el potos puede llegar a convertirse en uno de tus mejores amigos si eres un principiante en esto de las plantas. No hace falta que le prestes demasiada atención, basta con situarlo en un lugar donde reciba luz de manera abundante y olvidarte de regarlo hasta que él te lo pida. Cuando veas que sus hojas están mustias es hora de regar. Una de las cosas que más me gusta de esta planta es su fácil reproducción, solo con cortar un trozo y ponerlo en agua durante unos días, echará raíces y así, tendremos un nuevo esqueje listo para ser plantado. Es una planta capaz de eliminar sustancias tóxicas presentes en la pintura de las paredes o en el mobiliario. Existen estudios que han demostrado, además de su capacidad purificadora, sus propiedades para disminuir la tensión ocular.
ALOE VERA
Aloe vera
El aloe es una de esas plantas a las que no acabo de cogerle el puntillo, por más que cambie su ubicación o la frecuencia de sus riegos, no llega a alcanzar su total esplendor. Esta foto es una prueba de ello, pobrecita. Es una planta que requiere iluminación directa y riego muy escaso. Creo que, cuando la compré, uno de mis errores de principiante fue casi ahogarla, ya que estuvo a punto de pudrirse. A parte de las propiedades curativas que ya conocemos, también se caracteriza por ser una gran purificadora, ayuda a eliminar elementos químicos presentes en el aire de nuestra casa.
CINTAS
Chlorophytum comosum
Las cintas son otra de mis favoritas en la lista de plantas "todoterreno". No necesitan iluminación directa para crecer y tampoco un riego excesivo, eso si, en verano es aconsejable aumentar su frecuencia. Cuando van aumentando de tamaño, de ellas salen unos hijitos, mediante los cuales, podemos reproducirlas fácilmente. Son muy eficaces a la hora de eliminar gases como el monóxido de carbono y renovar el aire en una estancia cerrada.
